Aceite Esencial Lavanda

Propiedades del Aceite Esencial de Lavanda

El aceite esencial de lavanda es uno de los más populares y versátiles. Para obtenerlo se realiza un destilado de la planta Lavandula angustifolia, consiguiendo así preservar todas sus propiedades intactas.

Sirve para promover la relajación, e incluso se cree que trata la ansiedad, las infecciones por hongos, las alergias, la depresión, el insomnio, los problemas con eccemas, las náuseas e incluso los cólicos menstruales.

Por otro lado, es ampliamente recomendado debido a sus propiedades antiinflamatorias, antifúngicas, antidepresivas, antisépticas, antibacterianas y antimicrobianas. Y, por si fuera poco, tiene efectos antiespasmódicos, analgésicos, desintoxicantes, hipotensores y sedantes. 

El aceite esencial de lavanda sí se puede ingerir (aunque siempre siguiendo las indicaciones de un médico o el fabricante del producto). Incluso, es por vía oral que brinda la mayor parte de sus beneficios. Sin embargo, también puede aplicarse sobre la piel o inhalarse en sesiones relajantes de aromaterapia. 

Usos del Aceite Esencial de Lavanda

El aceite esencial de lavanda y sus beneficios han cautivado a todo el mundo. Por ejemplo, con sus efectos analgésicos y adormecedores, ayuda a aliviar la inflamación, mientras que el betacariofileno de su composición también actúa como un antiinflamatorio natural.

El aceite esencial de lavanda es útil para quemaduras, pues trata la inflamación que éstas generan. Para ello, combine una a tres gotas del aceite y una o dos cucharaditas de moringa o aceite de coco. Puedes aplicar la mezcla unas 3 veces por día.

Además, si tiene una quemadura, un corte, un raspado u otra herida, puede ayudar a acelerar el proceso de curación de la herida. Esto debido a que el aceite de lavanda promueve la curación del tejido de la piel.

Por otro lado, cumple una doble función para las picaduras de insectos. Esto debido a que actúa como repelente y, al mismo tiempo, puede aliviar la picazón después de una picadura.

Es decir, ayuda a aliviar las picaduras de insectos protegiéndonos de las bacterias y reduciendo la inflamación. También ayuda naturalmente a aliviar el dolor. Asimismo, el aceite de lavanda funciona bien para tratar la hiedra venenosa.

Además, si necesitamos saber con qué mezclar aceite esencial de lavanda, pues podremos elegir entre aceites esenciales de jazmín, geranio, abeto blanco, romero, tomillo, salvia, pomelo, naranja, limón, lima y mandarina. 

Aceite Esencial de Lavanda y sus Beneficios para la Piel

El aceite de lavanda actúa eliminando las bacterias, lo que ayuda a prevenir y curar los brotes de acné. Otros de sus efectos es que desobstruye los poros y reduce la inflamación cuando se lo aplica a la piel.

Además, podemos usarlo como tónico facial mezclando dos gotas de aceite de lavanda con una cucharadita de hamamelis.

La lavanda contiene propiedades antifúngicas muy importantes, así que es particularmente efectivo ante casos de eccemas. Reduce la inflamación y puede ayudar a mantener a raya este tipo de afecciones.

Puede utilizarse para tratar la psoriasis, ayudando a limpiar la piel y disminuyendo el enrojecimiento y la irritación.

Otra de sus aplicaciones es que sirve para ayudar a aclarar la piel, reduciendo la decoloración, incluidas las manchas oscuras. Además, si tiene hiperpigmentación en la piel, también puede ser de gran utilidad.

En su composición, el aceite de lavanda está lleno de antioxidantes que ayudan a protegernos ante los radicales libres. Por lo tanto, está especialmente indicado para las arrugas. Para ello, mezcle unas gotas del aceite junto con aceite de coco. Puede utilizarlo como humectante una o dos veces al día.

Beneficios del Aceite Esencial de Lavanda para el Cabello

El aceite esencial de lavanda consigue estimular el crecimiento del cabello, incluso es capaz de ayudar con problemas como la calvicie de patrón o la alopecia.

Otra de sus aplicaciones es como antimicrobiano, por lo que ayuda a prevenir el crecimiento de bacterias y hongos. En particular, puede prevenir la picazón del cuero cabelludo o la caspa e incluso las infecciones más comunes.

Es de gran utilidad para ayudar a prevenir o matar los piojos, ayudándonos a tener un cabello más limpio, saludable y protegido. 

Sirve para ayudar a frenar la inflamación de la piel, así que puede ser bueno para combatir la inflamación y la sequedad del cuero cabelludo.

Finalmente, como beneficio adicional, la lavanda tiene un olor maravilloso que hasta, literalmente, puede calmar tu sistema nervioso. 

Aceite Esencial de Lavanda en Aromaterapia

La inhalación de aceite esencial de lavanda tiene un efecto calmante y calmante sobre el sistema nervioso, lo que la convierte en una excelente alternativa para aliviar el estrés, la ansiedad, la depresión y la fatiga generados por el día a día.

Pero esto no es todo, puesto que inhalar aromas de lavanda puede aliviar la sensación de náuseas o mareos. Adicionalmente, su aroma a través de difusores o masajes en las sienes, la frente y el cuello puede ayuda a aliviar los dolores de cabeza.

Por último, si agregamos unas gotas de aceite de lavanda a un difusor junto a la cama por la noche, ayudaremos a relajar la mente y el cuerpo, mejorando la calidad del sueño en general.

Contraindicaciones del Aceite Esencial de Lavanda

No se recomienda si está tomando medicamentos que inducen somnolencia o destinados a reducir la presión arterial. Ante casos de lactancia materna es necesario consultar con un especialista. Lo mismo debe hacerse si se pretende usar aceite esencial de lavanda en el embarazo. 

Debido a que la lavanda actúa notablemente en el sistema nervioso central, se recomienda a los pacientes que dejen de usarla al menos 2 semanas antes de someterse a cualquier cirugía.